Tren negro
Día de
Sant Jordi. Rosas y Libros. Día grande de esta tierra. Una llamada. Un saludo.
Una noticia. Escucho con atención. Me cuenta, que en una agencia extraña, le
acaban de asignar, a la fuerza, un billete, sin fecha de salida, para viajar a
un lugar que desconoce. No está de acuerdo. No soporta que le obliguen a viajar
a lugares extraños. Peleará, luchará por romper ese billete, echo de un
material irrompible. Se negará a ir al punto de partida, a pesar que todas las
calles, de esa insólita ciudad, le conducirán a la estación maldita. Y peleó, y
luchó por romper ese billete. Y caminó siempre en dirección contraria, pero fue
a parar al punto, donde un extraño tren negro le esperaba. Y obligado… obligado
viajó a ese lugar desconocido. Y su entorno, nosotros, nos quedamos en el andén
de la tristeza. Además de la alegría, perdimos a un filósofo de la vida, a un
hablador convencido de lo que decía, a un observador incansable, capaz de
mejorar todo lo mejorable, o sea, todo. Aquí, los demás, andamos como
despistados, como perdidos. Te llevaste contigo, el mapa de los caminos
sencillos, y aquí, nosotros, estamos como extraviados, caminando por sendas
diferentes. A cambio, nos dejaste la llave de la caja fuerte, donde guardábamos
los recuerdos de tantos años. Gracias a ellos vuelves a estar con nosotros. Y
de nuevo volvemos a subir a lo más alto de este país. Y de nuevo volvemos a
beber vino de tu tierra. Y de nuevo disfrutamos de tu entusiasmo por las grúas.
Y volvemos al metro de Londres, y te vemos ilusionado diciendo aquello de: “Si
é mu triste de pedí, aún más triste é de robá…” Y de nuevo regalas globos a los
niños de Roma. Y de nuevo paras los telecabinas de Núria. Y de nuevo pides
limosna, con tu gorra, en Porto Santo. Y de nuevo… Y de nuevo se le acaban las
pilas a los recuerdos, y de nuevo volvemos a la realidad, al día a día, a la
monotonía. Hoy también es 23 de abril. Día de Sant Jordi. Día grande de esta
tierra. Rosas y Libros. Fue una gran ida que los mosqueteros fueran tres. Si
hubieran sido dos, hoy solo quedaría uno. Espéranos. Más tarde o más temprano
estaremos contigo. No le tenemos miedo al viaje. Le tenemos miedo al tren
negro. Para ti este relato, cuadrado, seguido, sin puntos y aparte. ¡Ah¡ y
también una rosa.