QUIERO...

Quiero...

Sufro lo que tú sientes.
Tu desánimo me aflige.
Me hunde verte abatida.
Tus lágrimas me derrumban.
No resisto ver que sufres.
Tu angustia se vuelve mía.
Hago mía también tu pena.
Me destroza tu tristeza.
Siento amargos tus silencios.
Lloro con lágrimas secas.
Y todo porque te quiero.
Y porque te quiero, quiero…
Quiero robarte el dolor.
Y lanzar al olvido tu angustia.
Y hacer añicos tu tristeza.
Y pintar de risas tus penas.
Y regalarte un ramo de optimismo.
Y ver tus lágrimas de alegría.
Y notar entusiasmo en tus ojos
Y escuchar que tus labios me dicen:
-Vuelvo a ser feliz, de nuevo.
-Vuelvo a ser feliz, mamá.